viernes, 20 de marzo de 2009

una semana en el mar y después....

Dos para las 4 a.m., estuve pensando en ella, pensando en lo imposible de que la nave aterrice de forma segura, quisiera poder dejar de tajo todo e irme de esta ciudad que no le veo ya no digo futuro, no le veo siquiera avance, si, soy culpable de estar aquí, si supiera que haciendo lo que mi sentido común me decía, estaría yo ahí en donde está ahora mi pensamiento, pero dice don Tadeo que la adversidad y la desgracia la soporta cualquiera, soportar la felicidad es el verdadero reto, pienso seriamente en esas palabras…

En la mañana desayuné en un lugar llamado “las mariposas” o algo así, me senté junto a la ventana, ella se había levantado muy temprano para ir a trabajar, me dio un beso en la frente y se marchó, no le pude decir “te quiero”, me imagino que si algún día no se lo digo, después, quizá no me pueda escuchar nunca más…

Como yo estoy desempleado, hoy me tocó la tarea de hacer el súper, levantar el hogar, asearlo, y preparar la comida, por la tarde, como es fin de semana, quizá vayamos a ese bar al que nunca hemos podido entrar a escuchar rock con un escocés en la panza… lo malo es que ella a veces tiene que ver ciertas cosas para poderlas creer…